Es difícil saber qué nos impulsa a comprar una base de maquillaje: anunciada en televisión, recomendación de amiga o publicidad de las revistas. Tienes que saber que no todas van bien a cualquier tipo de piel de manera que es importante escoger bien el formato y a partir de ahí, dar con el tono y con una marca asequible al bolsillo.
¿Cómo acertar? Te damos unos sencillos consejos para que des con la tuya.
* Según tu tipo de piel (con tendencia seca o grasa) te irá mejor un formato u otro. En mousse o con formato compacto en polvo con esponja por lo general irán destinadas a pieles más secas. Una base líquida será más apropiada para pieles mixtas consiguiendo así un acabado mate (ello no quiere decir que las pieles secas no puedan utilizar las líquidas y las mixtas una con acabado mousse).
* La base debe ser de un tono parecido al de la piel. Puedes probarla en la barbilla aunque solemos hacerlo en la mano.
* La forma de aplicarla también es muy importante. Cuando hablamos de brochas y pinceles recomendamos cómo usarlos. Existe gran furor por la beauty blender que es un esponja en forma de huevo aunque algunas prefieren aplicar el maquillaje con las dedos.
* La base debe ayudarte a verte mejor aspecto eliminando imperfecciones, mal tono y unificando el color. Prueba alguna base de efecto natural, que te aporte luminosidad o de larga duración, depende de lo que busques.
* Recuerda que el maquillaje debe ir acorde con el resto de tu look. Un vestido palabra de honor y una maquillaje efecto careta es un error.

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